En el Aula Magna del Campus de La Rábida de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), su rector, Eugenio Domínguez Vilches, entregará este viernes la Medalla de Oro que lleva el nombre de “Antonio Machado” a Antonio Pulido Gutiérrez, presidente de la Fundación Cajasol y también la medalla de la UNIA a título póstumo al profesor honorario de la UNIA , Alessandro Anastasi. Otra de las distinciones que se entregará será el Premio UNIA-Concha Caballero a Concepción Yoldi García, presidenta de la Fundación Persan.
El Consejo de Gobierno de la UNIA acordó conceder la Medalla de Oro a Antonio Pulido por su compromiso personal con el fomento de la cultura andaluza, el compromiso con colectivos vulnerables en la mejora de su situación personal y laboral y el compromiso con el fomento del emprendimiento empresarial en Andalucía. En cuanto al el profesor Anastasi, fue durante más de cuatro décadas titular de Derecho del Trabajo en la Universidad de Messina. Fuera del ámbito académico, ha sido juez del Tribunal arbitral de Basilea, viceprocurador de los Tribunales italianos, abogado, periodista, crítico de cine, ha dirigido programas de Televisión en RAI2 y RAI3.
Premio UNIA-Concha Caballero
Concha Yoldi es presidenta de la Fundación Persán desde su creación en 2006 y vicepresidenta de la empresa matriz Persán. Es la presidenta del Consejo Social de la Universidad de Sevilla y vicepresidenta de la Conferencia de Consejos Sociales de las Universidades Públicas de España.
El Premio Concha Caballero de la UNIA celebra su tercera edición. Ha sido concedido anteriormente a la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y a la cantaora Carmen Linares y su finalidad es reconocer la labor de aquellas personas que han contribuido a dar mayor visibilidad a las mujeres andaluzas no solo en el ámbito político, sino también en otros ámbitos de la sociedad. Su denominación es además un reconocimiento a la figura de la ex parlamentaria de Izquierda Unida, muy vinculada a Jaén, y a los valores que defendía y representaba tanto en el ámbito político como en el académico, cultural o personal y siempre en busca de la justicia y la igualdad social.
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