
Ecologistas en Acción ha remitido a la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía una carta solicitando la apertura de un procedimiento de investigación por la tala de alcornoques centenarios en el término municipal de Almonte (Huelva), en una finca en Zona A, «catalogada de máxima protección» por el Plan de Ordenación del Territorio del Ámbito de Doñana (Potad).
La tala contaba con los permisos de la Delegación de Medio Ambiente en Huelva, motivada porque «estaban afectados por escarabajos perforadores (‘Cerambyx spp.’) y la tala se realizó para paliar una plaga y sanear los árboles menos afectados», según ha señalado la organización ecologista.
Tras una visita efectuada a la finca por miembros de esta organización, se ha podido comprobar «que numerosos de los centenarios ejemplares de alcornoque abatidos no mostraban síntomas de afección. Además, se han encontrado pinos piñoneros de gran porte, a los cuales no les afecta este tipo de plaga, también talados y apilados con los alcornoques».
Dada, según Ecologistas en Acción, la situación de «muchas tensiones» como consecuencia de «la alta rentabilidad de la agricultura intensiva y la escasa o nula rentabilidad del monte de alcornocal, en la que la comarca está inmersa», se plantea la posibilidad de que la actuación sobre la masa forestal «pueda llevar por la vía de hechos consumados a un cambio de cultivo».
Ecologistas en Acción ha recordado que en la provincia de Huelva «apenas quedan unas 50.000 hectáreas de alcornocal que se están perdiendo a un ritmo vertiginoso como consecuencia del fenómeno de la seca«. Asimismo, han señalado que el alcornocal ha constituido históricamente un medio de vida para la población rural «por su alta rentabilidad para la ganadería extensiva y la extracción de corcho«.
Por todo ello, los ecologistas han solicitado que la Consejería de Medio Ambiente confirme la existencia de los informes sanitarios de la masa previos y aclare si el condicionado exigido dada la máxima protección que le confiere su ubicación en Zona A incluye el marcaje de ejemplares singulares, la señalización de flora protegida, las medidas de protección de aves cuyo hábitat y lugar de nidificación es el alcornocal o el plan de reforestación.
Asimismo, han pedido el informe de seguimiento y vigilancia correspondiente a los Agentes de Medio Ambiente para saber si la ejecución de la actuación «se ha ajustado a las prescripciones técnicas que en su caso debieran haber sido emitidas por la autoridad competente, la Delegación de Medio Ambiente en Huelva».
La organización ecologista recuerda que «lleva años» reclamando mayor inversión e investigación para la recuperación de las dehesas y, de manera inmediata, la repoblación como «medida urgente» para que el monte mediterráneo y los ecosistemas autóctonos se recuperen «y vuelvan a dar los numerosos bienes y servicios y el valor ambiental tan rico que lo caracteriza».
Escribe una respuesta