El Rey marca el camino pero la incertidumbre es cada día mayor en Cataluña ante la posición independentista

La situación en Cataluña es un volver a empezar con mucha más incertidumbre. El Rey Felipe VI, en su discurso de Navidad, ha expuesto cuál debería ser el camino pero los dirigentes de los partidos independentistas andan ‘lanzados al monte’ y años de mentiras han llevado la ceguera a una parte de los ciudadanos catalanes. Las declaraciones en días posteriores al 21-D no dejan lugar a dudas. El desafío se va a mantener porque la convocatoria con demasiada prisa por Rajoy de un proceso electoral, sin antes haber desmontado la maquinaria montada desde las estructuras institucionales de la Generalitat y con dinero público, permite mantener una mayoría parlamentaria que, casi con toda seguridad, piensa seguir el camino ya trazado.

Conviene recordar que la gestación del ‘golpe de Estado’ en Cataluña se ha venido gestando desde hace varios años sin que los servicios secretos del CNI se hubieran percatado de nada y sin que la vicepresidenta del Gobierno, que estaba encargada del tema catalán, tuviera conocimiento de los terrenos que pisaba cuando se reunía, entre risas y buenas palabras, con Oriol Junqueras. El sumario que instruye el Tribunal Supremo va dejando al descubierto la trama golpista que preparaba la ruptura con el Estado español, los argumentarios meticulosamente estudiado de los mensajes y cómo se hacían con el control de los medios públicos, portavoces de una parte de Cataluña, además de tejer una red social con asociaciones y pequeños ayuntamientos financiado con fuertes cantidades de dinero. Y todo ello sin que el Gobierno de Rajoy se percatara de nada.

Esta falta de visión le ha llevado a cometer un error clave. El articulo 155 le permitía un control de la Generalitat pero los hechos han ido evidenciado que, bien miedo o las reacciones contrarias, que se ha mantenido intacto todo el ‘aparato’ desde una institución pública de los golpistas. Con este tinglado intacto la convocatoria de unas elecciones con tanta prisa, poco o nada iban a permitir desmontar y eso es lo que ha ocurrido pese al esfuerzo titánico de los dirigentes de Ciudadanos.

En este volver a empezar, tras la jornada del 21-D, hay que esperar a cómo se forma el nuevo Gobierno y si manifiesta en la investidura cuál es su plan. La acción de la Justicia va a seguir adelante porque los hechos contra el Estado, la Constitución y la democracia son muy graves. En las palabras de S.M. el Rey Felipe VI ha quedado definido lo que puede hacerse y lo que no por los representantes elegidos en estos comicios. Ha querido dejar una puerta abierta a la esperanza. Veremos qué ocurre.

Sé el primero en comentar...

Escribe una respuesta

Tu dirección de correo no será publicada.


*