El monumento homenaje a la figura del calero de Ayamonte, vuelve a ocupar su lugar habitual, en el Camino Real de La Villa, tras las labores de restauración a las que ha sido sometido para devolverle su estado original, que había sido seriamente dañado tras sufrir diversos ataques vandálicos que habían ocasionado importantes daños en el conjunto monumental, rodeado ahora de una valla perimetral para dotarlo de mayor protección.
El monumento a Los Caleros, conocido como «El burrito», fue inaugurado en 2002 con motivo de la celebración de las Fiestas del Salvador. La obra, que se ubica en un lugar muy próximo a la zona en la que se encontraban los antiguos hornos de cal, rinde homenaje a la figura del calero, una profesión tradicional en la localidad fronteriza y prácticamente extinguida en la actualidad, en la que estos artesanos utilizaban el burro como elemento de ayuda en el transporte y venta de la cal, recorriendo todos los barrios ayamontinos al grito de «Cal blanca», una frase que pregonaban a diario y que forma parte de la historia de la ciudad.
El alcalde de la ciudad, Alberto Fernández, acompañado por el concejal Aarón Rodríguez, ha asistido esta mañana a la reposición del monumento, que ha sido restaurado por su autor, el escultor ayamontino Pepe Gámez. El artista ha mostrado su agradecimiento y sensibilidad al Ayuntamiento y ha señalado que «tras años de diálogo con la anterior corporación municipal, finalmente este nuevo equipo de Gobierno ha apostado por devolver su esplendor a monumentos que forman parte del patrimonio paisajístico de la localidad». Gámez ha explicado que la obra estaba muy deteriorada y ha pedido a los ciudadanos que «cuiden de ésta y de otras esculturas que embellecen nuestro entorno».
Señas de identidad
Por su parte, el primer edil se ha mostrado satisfecho por la reposición de la estatua, al tiempo que ha recordado que el actual equipo de Gobierno sigue trabajando en la recuperación de las señas de identidad de Ayamonte. En este sentido, ha comentado que el Ayuntamiento ha encargado a Gámez la restauración de otras obras emblemáticas de la localidad, como el monumento homenaje a la Mujer Conservera, que tras un proceso restaurador, volvió el pasado mes de dieciembre a su lugar de origen, en el Muelle de Portugal, o el monumento de la Matraca.
Fernández ha apelado a la ciudadanía para que, “entre todos, cuidemos nuestro patrimonio”, al tiempo que ha lamentado “los actos vandálicos que dañan lo que es de todos y que entre todos debemos cuidar y conservar”.
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