De esta forma, el Gobierno andaluz trata de incentivar inversiones en actividades de transformación de los productos de la pesca y la acuicultura que contribuyan a ahorrar energía o reducir el impacto en el medio ambiente, inversiones que den lugar a nuevos o mejores productos, procesos o sistemas de gestión y organización, así como inversiones que mejoren la seguridad, la higiene, la salud y las condiciones de trabajo.
En todos los casos, los destinatarios son pymes, y las actividades que tienen la consideración de transformación son el congelado de la pesca fresca, la elaboración de conservas, semiconservas, ahumados, salazones y otros transformados de las especies pesqueras. Las principales especies pesqueras procesadas en las industrias de transformación son el salmón, la melva, la caballa, el atún, el pulpo, el cangrejo, el bacalao, el pez espada, la gamba y el langostino. En menor cantidad, también se procesan especies como el choco, el corruco y la rosada.
Además, el Consejo de Gobierno también ha tomado conocimiento de la convocatoria de ayudas para el fomento de la comercialización, promoción y búsqueda de nuevos mercados de los productos de la pesca y la acuicultura, para lo que se destina casi 210.000 euros que al igual que las ayudas anteriores se conceden en el marco del Programa Operativo del Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca.
Mediante esta línea de ayudas se subvencionarán campañas de publicidad genéricas a través de los diversos canales de comunicación, elaborar material promocional, dosieres y monográficos divulgativos, así como estudios de mercado y sobre las dependencias de las importaciones, organizar catas, degustaciones y presentación de productos, promocionarse en puntos de venta o hacer frente a gastos de participación en ferias, entre otras actividades.
Además, se han autorizado subvenciones para la comercialización, promoción y búsqueda de nuevos mercados de estos productos
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